miércoles, 21 de diciembre de 2011

Y a esto le llamamos tener una vida...



Dejar caer las mascaras, sacar ese lado malo que llevamos dentro, bailar bajo la lluvia sin temor a pasar unos días en cama enfermos, dar besos hipócritas, abrazar a quien odiamos, conocer un poco más a quien nos ama y entender por qué lo hace, rezarle una novena al niño Dios y cantar como cuando éramos chicos, tocar una puerta y salir corriendo, patinar, correr y quedar tan cansados que no podamos ni hablar, bailar hasta quedar con los tacones en la mano…




¿Verdad que no nos atrevemos a hacerlo? Tememos tanto a que una sociedad nos juzgue que terminamos haciendo parte de un montoncito de gente que deja que el tiempo maneje sus vidas, ya no tenemos espacio ni para tomar una decisión; nos estamos perdiendo de observar el color de las rosas que nos regalaron, sentir el olor del jabón con que nos bañamos o simplemente ver como corren las goteras por la ventana cuando llueve…




¿Realmente esto tiene algún sentido?

No hay comentarios:

Publicar un comentario